El siniestro encanto del coronel Hans Landa
Hans Landa es uno de los más grandes personajes que he escrito, y uno de los más grandes personajes que llegaré a escribir
Quentin Tarantino
¿Qué tienen en común Hannibal Lecter, Joker, Phillip Vandamm, John Doe, Hans Gruber, Darth Vader o Walter E. Kurtz? Todos son unos malditos bastardos. La encarnación del mal más descarnado. Villanos que atrapan la atención del espectador con sus vilezas cargadas de inteligencia. De cruel astucia. Al selecto grupo salvaje se ha unido otro salido de la mano que rompe la cuna en esto del cine actual: Quentin Tarantino. Se llama Hans Landa, es coronel de las SS y se apodera del protagonismo de Malditos bastardos desde que sale en la primera secuencia y es desalojado en la última. Un tipo repelente al que el director entrega la mejor artillería verbal, los momentos más explosivos de una película que se construye, se destruye y se reconstruye merced al bulldozer tarantiniano.
Hasta ahora, Vincent Vega, el personaje que rescató del olvido a John Travolta en Pulp Fiction, era el favorito de los seguidores de Quentin. ¿Corre peligro su trono? Una encuesta de un portal de internet colocaba al pistolero de larga cabellera, verbo corto y traje negro tatuado en su piel con el 38,5% de las votaciones. Le sigue de cerca, con el 36,7% de los votos, otra asesina a sueldo: Beatrix Kiddo, alias la Novia, alias Bamba Negra. Umma Thurman le puso sus afilados rasgos en Kill Bill. Muy lejos, con el 10,36%, está Mr. White (Harvey Keitel), otro tipo de cuidado que brillaba por su presencia en Reservoir Dogs (ya llovió sangre desde que Tarantino armó la de San Quentin con su ópera prima).
Hans Landa (interpretado con maestría nada pomposa por el ¡hasta hoy! poco conocido actor austriaco Christoph Waltz) es otro asesino, aunque menos “simpático” que el estólido Vega y sin el elemento emotivo que hacía humana a la vengativa guadaña de Kill Bill. Landa es un cazador profesional de los judíos durante la II Guerra Mundial. Así lo consideran sus enemigos y así se etiqueta él, encantado de conocerse: “Me encanta el título no oficial que me han dado, justamente porque me lo he ganado. Lo que hace de mí un cazador de judíos tan eficaz es que, al contrario de la mayoría de los soldados alemanes, sé pensar como un judío, mientras que ellos sólo saben pensar como alemanes o, más exactamente, como soldados alemanes”.
Los rastreadores del territorio Tarantino (como se sabe, hecho de infinidad de paisajes cinematográficos, todos los nombres de sus personajes tienen algún tipo de guiño y homenaje) concluyen que el director tomó prestados rasgos del coronel Douglas Mortimer en La muerte tenía un precio (Lee van Cleef le prestaba su memorable rostro de reptil). Mortimer era un cazador de recompensas implacable que, curiosamente, fumaba una pipa similar a la que usa Landa, y que también era la favorita de Sherlock Holmes.
Landa, cuya elegante y sibilina astucia para realizar su sanguinario trabajo lo emparenta con muchos de los malvados a los que se han enfrentado los James Bond a lo largo de su historia (uno de los sueños de Quentin es hacer alguna peli de 007, ojalá lo cumpla), se permite incluso la provocación de beber leche (algunos lo ven como una metáfora de la inocencia perdida o un trauma de la infancia, del mismo modo que la aparatosa pipa puede entenderse como un alarde de virilidad, igual se pasan). El nexo de unión con Holmes parece más comprensible: como el célebre detective, Landa (y él mismo se define a sí mismo como tal) escenifica toda una táctica de sabueso sabelotodo para encontrar a sus piezas. También comparte con Holmes cierto desdén o indiferencia hacia los que le rodean, que no están a la altura de su mente privilegiada. Ahí enlazaría con otro Hans: el maligno y viscoso Gruber de La jungla de cristal, que Alan Rickman hizo inolvidable. Tan alemanes. Tan preocupados por su apariencia. Tan charlatanes. Lo malo es que Landa no tiene enemigos a su altura. El gran drama de esta bestia humana es que los malditos bastardos a los que se enfrenta son un hatajo de patanes incapaces de reconocer su superioridad. Una trágica decepción que le emparenta con la angustia vital de tantos tiranos que no comprenden por qué el resto del mundo no se rinde a su poder mesiánico.
“Si uno tuviera que determinar qué atributos comparten los judíos con una bestia, éstos serían los de la rata. En qué mundo tan tremendamente hostil se ve obligada a vivir una rata. No obstante, no sólo sobrevive, sino que además se propaga en él. Y la razón es que nuestro pequeño enemigo tiene un instinto de supervivencia insuperable. Yo sí sé de qué tremendas hazañas son capaces los seres humanos cuando pierden la dignidad”.
Éste es un resumen del maquiavélico discurso con el que, en el arranque de la película, Hans Landa arrebata a su interlocutor una horrenda confesión. Con su lengua venenosa y su cerebro al servicio del mal (capaz de dinamitar el III Reich si se lo propone, en el fondo también desprecia a los Hitler de turno), Hans Landa es capaz de convencer a sus víctimas de que sabe más de lo que sabe. De que ningún secreto le es ajeno. Y que incluso las Cenicientas que pierden zapatos en la escena del “delito” dejan un rastro indeleble. Hans Landa, qué malo tan bueno le ha salido al travieso Tarantino.
Escrito por Tino Pertierra el 10/03/09 •
la opinion A coruña
premios recibidos por Malditos bastardos
Broadcast Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Broadcast Film Critics Association Award for Best Cast
Best Actor Award (Cannes Film Festival)
New York Film Critics Circle Award for Best Supporting Actor
National Society of Film Critics Award for Best Supporting Actor
Boston Society of Film Critics Award for Best Supporting Actor
Hollywood Film Festival Best Supporting Actor
Southeastern Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Las Vegas Film Critics Society Award for Best Supporting Actor
Florida Film Critics Circle Award for Best Supporting Actor
Los Angeles Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Austin Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Detroit Film Critics Society Award for Best Supporting Actor
Chicago Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Phoenix Film Critics Society Award for Best Supporting Actor
Dallas-Fort Worth Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Houston Film Critics Society Award for Best Supporting Actor
Toronto Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
San Diego Film Critics Society Award for Best Supporting Actor
Washington DC Area Film Critics Association Award for Best Supporting Actor
Satellite Award for Best Supporting Actor - Motion Picture
Golden Globe Award for Best Supporting Actor – Motion Picture
Screen Actors Guild Award for Outstanding Performance by a Male Actor in a Supporting Role
OSCAR AL MEJOR ACTOR DE REPARTO
1 comentarios:
Gran mercido y reconocido Oscar al caballero Christoph Waltz una gran actuación de interpretación.
Lo han reconocido tan pronto por que era muy evidente que entrará en los anales de los villanos más realistas paridos por Tarantino.
Desde luego que la pelicula en cuestión es una fábula pero lo hace más creible con esta clase de actores.
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